Cuatro Áreas de Nuestra Vida En las que Dios Siempre Nos Está Observando

En este mensaje, el Pastor Luis señala diversas áreas de la vida en las que cada cristiano puede mejorar.

Notas del Sermón

Eclesiastés 5:1-20

Introducción:

  • Es mi convicción que como cristianos todos deseamos agradarle a nuestro Dios con nuestras acciones.
  • Por lo menos, ese debería ser nuestro objetivo todos los días; contar con el beneplácito de Dios.
  • Nuestra meta cada día debe ser, ser personas que Dios nos ve con agrado. Que está complacido con nuestras acciones.
  • No obstante, esta es una batalla de todos los días. Algunas veces triunfamos, otras fallamos.
  • En este día estaré compartiendo el mensaje: Cuatro Áreas de Nuestra Vida En las que Dios Siempre Nos Está Observando.
  • Las presento con el objetivo de que podemos mejorar en esas áreas específicas.
I. Primero, Dios siempre está observando cómo nos compartamos en la casa de Dios

a) Dios espera que cuando vayamos a su casa tengamos una actitud de adoración

Eclesiastés 5:1-3
1 Cuando fueres a la casa de Dios, guarda tu pie; y acércate más para oír que para ofrecer el sacrificio de los necios; porque no saben que hacen mal. 2 No te des prisa con tu boca, ni tu corazón se apresure a proferir palabra delante de Dios; porque Dios está en el cielo, y tú sobre la tierra; por tanto, sean pocas tus palabras. 3 Porque de la mucha ocupación viene el sueño, y de la multitud de las palabras la voz del necio.

b) Dios espera que cuando vayamos a su casa no hagamos promesas a la ligera

Eclesiastés 5:4-6
4
Cuando a Dios haces promesa, no tardes en cumplirla; porque él no se complace en los insensatos. Cumple lo que prometes. 5 Mejor es que no prometas, y no que prometas y no cumplas. 6 No dejes que tu boca te haga pecar, ni digas delante del ángel, que fue ignorancia. ¿Por qué harás que Dios se enoje a causa de tu voz, y que destruya la obra de tus manos?

c) Dios espera que cuando vayamos a su casa tengamos una actitud de reverencia total

Eclesiastés 5:7
7 Donde abundan los sueños, también abundan las vanidades y las muchas palabras; mas tú, teme a Dios.

II. Segundo, Dios siempre está observando como lidiamos con la injusticia que vemos en este mundo

a) La injusticia es muy común y no debe sorprendernos

Eclesiastés 5:8
8 Si opresión de pobres y perversión de derecho y de justicia vieres en la provincia, no te maravilles de ello; porque sobre el alto vigila otro más alto, y uno más alto está sobre ellos.

b) Dios es el juez supremos y castigará la injusticia

Eclesiastés 5:8
8 Si opresión de pobres y perversión de derecho y de justicia vieres en la provincia, no te maravilles de ello; porque sobre el alto vigila otro más alto, y uno más alto está sobre ellos.

c) Todos estamos sujetos a alguien

Eclesiastés 5:9
9 Además, el provecho de la tierra es para todos; el rey mismo está sujeto a los campos.

III. Tercero, Dios siempre está observando de qué manera nos relacionamos con el dinero o los bienes materiales

a) Nuestra relación con el dinero no debe ser de dependencia espiritual (el dinero no llena nuestro vacío espiritual)

Eclesiastés 5:10-12
10
El que ama el dinero, no se saciará de dinero; y el que ama el mucho tener, no sacará fruto. También esto es vanidad. 11 Cuando aumentan los bienes, también aumentan los que los consumen. ¿Qué bien, pues, tendrá su dueño, sino verlos con sus ojos? 12 Dulce es el sueño del trabajador, coma mucho, coma poco; pero al rico no le deja dormir la abundancia.

b) El dinero no se debe malgastar

Eclesiastés 5:13-14
13 Hay un mal doloroso que he visto debajo del sol: las riquezas guardadas por sus dueños para su mal; 14 las cuales se pierden en malas ocupaciones, y a los hijos que engendraron, nada les queda en la mano.

c) Debemos asegurarnos de qué disfrutamos nuestras vidas

Eclesiastés 5:15-17
15 Como salió del vientre de su madre, desnudo, así vuelve, yéndose tal como vino; y nada tiene de su trabajo para llevar en su mano. 16 Este también es un gran mal, que como vino, así haya de volver. ¿Y de qué le aprovechó trabajar en vano? 17 Además de esto, todos los días de su vida comerá en tinieblas, con mucho afán y dolor y miseria.

IV. Cuarto, y último, Dios desea que disfrutemos los bienes materiales que Él nos ha dado

a) Debemos comer y beber bien

Eclesiastés 5:18
18
He aquí, pues, el bien que yo he visto: que lo bueno es comer y beber, y gozar uno del bien de todo su trabajo con que se fatiga debajo del sol, todos los días de su vida que Dios le ha dado; porque esta es su parte.

b) El hombre que disfruta lo que Dios le ha dado, es un hombre bendecido

Eclesiastés 5:19
19 Asimismo, a todo hombre a quien Dios da riquezas y bienes, y le da también facultad para que coma de ellas, y tome su parte, y goce de su trabajo, esto es don de Dios.

c) El hombre que disfruta lo que Dios le ha dado, vive una vida de gozo

Eclesiastés 5:20
20 Porque no se acordará mucho de los días de su vida; pues Dios le llenará de alegría el corazón.

V. El quinto, y último principio que Salomón aprendió que podría ayudarnos a transformar nuestras vidas es que practiquemos la sabiduría pero que no nos llenemos de orgullo

a) Sin importar nuestra edad, debemos practicar la sabiduría, la inteligencia y la ciencia

Eclesiastés 4:13-14
13
Mejor es el muchacho pobre y sabio, que el rey viejo y necio que no admite consejos; 14 porque de la cárcel salió para reinar, aunque en su reino nació pobre.

b) Como parte de la realidad de ser sabios no nos engañemos cuando veamos que muchas personas nos siguen

Eclesiastés 4:15
15 Vi a todos los que viven debajo del sol caminando con el muchacho sucesor, que estará en lugar de aquel.

c) Eventualmente nos seguidores falsos nos abandonarán

Eclesiastés 4:16
16 No tenía fin la muchedumbre del pueblo que le seguía; sin embargo, los que vengan después tampoco estarán contentos de él. Y esto es también vanidad y aflicción de espíritu.

IV. Conclusión y aplicación
  • En este pasaje bíblico, se asume, de qué los hijos de Dios frecuentarán la casa de Dios.
  • En el lenguaje bíblico, esto significa que los creyentes deben asistir a la casa de Dios todas las veces que exista la posibilidad de hacerlo.
  • Cuando asistimos a la casa de Dios no debemos hacerlo con el propósito de encontrar satisfacción para nuestros propios gustos y preferencias (alabanza, comodidades, servicios)
  • Cuando asistimos a la casa de Dios debemos tener mucho cuidado con los compromisos o los pactos que establecemos con Dios.
  • Cuando asistimos a la casa de Dios debemos tener total reverencia por la santidad de Dios.
  • La vida nos demuestra que la injusticia es algo que existe en diferentes lugares y se expresa de diferentes maneras (nadie está exento de actuar injustamente).
  • Dios desea que identifiquemos la injusticia y que hagamos lo que sea necesaria para erradicarla.
  • Dios es el máximo juez y ejecutará juicio en contra de nosotros si practiquemos la injusticia.
  • Nuestros bienes materiales pueden ser grandes amigos o terribles enemigos. (Terrible señor, excelente siervo).
  • Nunca debemos ver nuestros bienes materiales como un medio de llenar nuestra necesidad espiritual.
  • Los bienes materiales debemos invertirlos y gastarlos correctamente.
  • Siempre debemos darle gracias a Dios por todas las cosas materiales que Él nos ha permitido adquirir.
  • Solamente cuando tenemos un corazón agradecido, es cuando realmente podemos disfrutar las cosas materiales que Dios nos ha dado.
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