Es importante mantenernos enfocados en Cristo para no caer en frialdad espiritual.

Pero tengo contra ti, que has dejado tu primer amor.

Apocalipsis 2:4

Los hermanos de la iglesia de Éfeso eran personas fieles, sufridas, pacientes, esforzados, con discernimiento espiritual, pero lamentablemente se habían desenfocado de Cristo.

Si en este tiempo hubiera una iglesia que tuviese esas características diríamos que es la iglesia perfecta. Una iglesia espiritualmente sana. No obstante, el señor afirma: “pero tengo contra ti, que has dejado tu primer amor”. Sabemos que la iglesia de Éfeso no era negligente, ni mundana.

Por lo tanto, podemos concluir que la afirmación del Señor podría implicar otras realidades: Probablemente la iglesia de Éfeso cumplía sus funciones por costumbre en el mejor de los casosy en el peor, por obligación. Las funciones ministeriales esenciales de la iglesia se habían convertido en algo monótono para ellos.

El alabar a Dios, el asistir a la iglesia, el evangelizar, el servir a los demás, el contribuir con la obra se había convertido en algo sin relevancia, que obedecía a una costumbre más que a un deseo vehemente. Habían perdido la pasión, la emoción y el encanto por el servicio en la obra del Señor.  

Basado en estas realidades, es importante mantenernos enfocados en Cristo para no caer en frialdad espiritual. Esto siempre es un peligro real. Dios desea que le sirvamos, pero no por obligación, costumbre o coerción. Cultivemos una relación íntima con Dios. Practiquemos las disciplinas espirituales y nunca permita que el servicio a la obra de Dios se convierta en una rutina.

Foto de Ben White en Unsplash

Este material ha sido escrito por el Pastor Dr. Luis M. Mendoza. Si desea hacer copias o reproducirlo, favor de contactar al escritor. Todos los Derechos Reservados.©

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