Bíblicamente hablando, solo Jesucristo reúne todas las características exigidas por el Padre para lograr la eterna salvación de todas las personas que creen en él. Por lo tanto, solamente creyendo en Jesús una persona puede adquirir salvación y vida eterna.
Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.
Hechos 4:12
El evangelio tiene la virtud de ser inclusivo y exclusivo. Es inclusivo porque personas de diferentes grupos étnicos, estratos sociales y tendencias políticas serán salvas; y es exclusivo, porque solo creyendo en Cristo se puede ser salvo. Este es uno de los principales distintivos de la fe cristiana.
La realidad es que, bíblicamente hablando, solo Jesucristo reúne todas las características exigidas por el Padre para lograr la eterna salvación de todas las personas que creen en él. Por lo tanto, solamente creyendo en Jesús una persona puede adquirir salvación y vida eterna. El único que puede abrir las puertas de los cielos para nosotros es Jesucristo. El depositar nuestra fe en cualquier otra persona solo nos guía al error y a la eterna condenación.
Considerando que solamente en el nombre de Jesús hay salvación y vida eterna es necesario que todos nos aseguremos que ya hemos establecido una relación de salvación con Jesús; y que a la vez nos convirtamos en anunciadores de las virtudes de aquel que nos llamó de las tinieblas a su luz admirable, nuestro gran Dios y Señor Jesucristo.
Nunca dejemos de compartir el único nombre que es sobre todo nombre, y en el cual se doblará, toda rodilla de los que están en los cielos, en la tierra, y debajo de la tierra, el nombre glorioso y excelso de Jesús.
Este material ha sido escrito por el Pastor Dr. Luis M. Mendoza. Si desea hacer copias o reproducirlo, favor de contactar al escritor. Todos los Derechos Reservados.©