Decida hoy buscar el beneplácito de Dios sobre su vida.
Yo en muy poco tengo el ser juzgado por vosotros, o por tribunal humano; y ni aun yo me juzgo a mí mismo.
1 Corintios 4:3
La evidencia bíblica nos compele a creer que nuestra principal preocupación no debe ser qué es lo que las personas piensan de nosotros, si no, cuál es la opinión que Dios tiene de nosotros; como Dios nos ve.
Este pasaje nos enseña que Pablo no tenía ninguna preocupación con relación, a lo que las personas en general creían de él, tampoco estaba interesado en lo que las personas en autoridad opinaban de él, en realidad, tampoco le preocupaba lo que él mismo pensaba con relación a sí mismo. Su preocupación fundamental era determinar con exactitud cuál era la opinión que Dios tenía de él. Es claro que para el apóstol Pablo nada importaba más en la vida que lo que Dios pensaba de él.
Considero que esa debería ser nuestra misma posición con relación a la manera en que vivimos y nos comportamos. Al final de nuestras vidas debemos tener completamente claro que al que le daremos cuenta es a Dios. Por lo tanto, debemos vivir vidas agradables delante de Él y asegurarnos que contamos de su total beneplácito. Esto a la vez podría traer ricas bendiciones para nosotros.
Lamentablemente, muchos de nosotros en diferentes momentos de nuestras vidas estamos más interesados en lo que lo que los hombres piensan de nosotros, en vez de cuál es la opinión de Dios. Decida hoy buscar el beneplácito de Dios sobre su vida.
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Este material ha sido escrito por el Pastor Dr. Luis M. Mendoza. Si desea hacer copias o reproducirlo, favor de contactar al escritor. Todos los Derechos Reservados.©