No somos responsables de comprender lo que Dios no nos ha revelado en su totalidad.

Las cosas secretas pertenecen a Jehová nuestro Dios; mas las reveladas son para nosotros y para nuestros hijos para siempre, para que cumplamos todas las palabras de esta ley.

Deuteronomio 29:29

Dios ha decidido que habrá cosas que jamás nos va a revelar en su totalidad mientras vivamos en este mundo. No obstante, es hermoso saber que eventualmente todo lo entenderemos, una vez que estemos en el cielo.

Mientras vivamos en la tierra no podemos ver todas las cosas con tanta claridad, pero eso será distinto una vez que estemos en la gloria. A la vez, las cosas que Dios nos ha explicado claramente en las Escrituras son para que las aprendamos y practiquemos nosotros, y nuestraspróximas generaciones. No hay excusas para que no las cumplamos.

Dios nos compele, no solamente a conocer lo que Dios desea que hagamos sino a practicarlo de manera regular. Si no practicamos lo que hemos aprendido, realmente todavía no hemos aprendido nada. Es el cumplimiento de lo aprendido lo que demuestra si hemos llegado a aprender verdaderamente algo.

Como creyentes no debemos preocuparnos por entender todas las cosas que Dios ha escrito en Su Palabra o todos los acontecimientos que Dios permite que sucedan en nuestras vidas o en el mundo. No somos responsables de comprender lo que Dios no nos ha revelado en su totalidad. De lo que sí somos responsable es de todas las cosas que Dios nos ha revelado con claridad para que las hagamos y obedezcamos. Lo secreto es de Dios, lo revelado para que lo obedezcamos.

Foto de Ümit Bulut en Unsplash

Este material ha sido escrito por el Pastor Dr. Luis M. Mendoza. Si desea hacer copias o reproducirlo, favor de contactar al escritor. Todos los Derechos Reservados.©

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