Las lagrimas derramadas por Jesús aparte de demostrar su humanidad también apuntan a que Jesús era capaz (y lo sigue siendo) de identificarse con la calamidad y el dolor humano.

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Devocional: Por Qué Lloró Jesús (audio)
Jesús lloró. Juan 11:36

Nuestras lágrimas son una expresión tangible de que somos seres emocionales habilitados por Dios para expresar alegría, dolor, tristeza, compasión y empatía. Nuestras lagrimas reflejan una de las características de haber sido creados a la imagen de Dios.

El recuento bíblico con relación a que Jesús lloró nos revela claramente que aparte de ser divino, Jesús también era un ser humano que tenía emociones al igual que nosotros. Las lagrimas derramadas por Jesús aparte de demostrar su humanidad también apuntan a que Jesús era capaz (y lo sigue siendo) de identificarse con la calamidad y el dolor humano.

Jesús lloró para demostrarnos que (contrario a la opinión de algunos) no hay ningún problema en que, en ciertas ocasiones, como resultado del dolor ocasionado por situaciones tristes o dolorosas nosotros también expresemos nuestro sentir y emociones a través de derramar nuestras lágrimas.  

Interesantemente, Jesús no lloró necesariamente porque Lázaro había muerto, si no para solidarizarse con el dolor de las hermanas y parientes de Lázaro. Él sabía exactamente lo que iba a hacer en los próximos minutos, resucitar a Lázaro. Por lo tanto, sus lágrimas son una expresión de respaldo al dolor humano.  

No dudemos de expresar nuestro dolor y sentimiento de perdida a través de nuestras lágrimas.

Usted y yo podemos llorar por situaciones justificadas. Jesús comprende nuestro llanto y nuestras lágrimas. A la vez, nunca olvidemos la importancia de solidarizarnos con los demás en su dolor. Jesús así lo hizo.

Este material ha sido escrito por el Pastor Dr. Luis M. Mendoza. Si desea hacer copias o reproducirlo, favor de contactar al escritor. Todos los Derechos Reservados.©

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