Las Consecuencias de Nuestra Rebeldía

Eventualmente, Dios podría cansarse de nuestra rebeldía y dejarnos lidiar con las consecuencias de nuestros rebeldes corazones.

Dios se había cansado de la rebeldía del pueblo de Israel. Hasta ese momento el plan era introducirlos prontamente a la tierra prometida. Moisés había enviado doce espías a explorar la tierra; Diez trajeron un reporte fatalista y negativo. Dos, Caleb y Josué estaban listos para iniciar la conquista.

Aunque habían estado en los mismos territorios Caleb y Josué tenían una visión completamente distinta de la situación. La diferencia fundamental entre ellos y el resto de los espías era que confiaban en Dios. Solo los niños y los jóvenes, juntos con Caleb y Josué entrarían a la tierra prometida; los demás morirían en el desierto. Dios había tomado una decisión final y trágica en contra de los rebeldes, pagarían la rebeldía con sus vidas.

Que triste es cuando estamos tan cerca de recibir la total bendición de Dios, y nuestra rebeldía, desconfianza y hostilidad no nos permite recibirla. Nuestra incredulidad nos priva de disfrutar de la plenitud de la bendición. Por lo tanto, es necesario ejercitar hoy nuestra fe y confianza en Dios, sin esperar a que las condiciones sean perfectas. Actuemos de acuerdo con los propósitos de Dios. Cumplir Sus objetivos no será necesariamente fácil, pero con Su ayuda, todo es posible.